Objeto de deseo que se cotiza al alza cuando el termómetro supera la barrera de los 20 grados. Tanto a pleno sol como a la sombra, tanto de día como de noche. Unos descansan, otros observan, otros se exponen, otros se refrescan, otros se broncean, y otros (mi caso) huyen de las paredes. Da igual la temperatura exterior, me paso todo el año buscando locales con exterior acondicionado. Me gusta sentir el aire aunque me pierda la música y el ambiente del interior. Antes tenía la excusa del humo del tabaco pero, una vez erradicado, libre de ambientes tóxicos sigo prefiriendo no sentirme asediado. Luego, llevándolo a coto privado, se convierte en un lujo del que no quiero prescindir en mi casa futurible. Por supuesto huiré de plásticos, telas sintéticas, acabados en brillo, fribras de ratán y similares. Por lo demás estoy abierto a todas las propuestas, como la colección Hypha de POS1T1ON.
